Cuando se pierde la confianza de quien amas ya no hay nada no hay razón, por continuar esa novela si el guión se trata de traición.
Perdón, de que? ¡No me vas a convencer! Por tantas noches de amargura, la soledad en mi habitación.
Me fuiste infiel, no te hagas el loco la víctima soy yo. Que me parta un rayo si te perdono adolorida en mi interior.
La misma canción y el verso, siempre me dices eso pero ya el daño está hecho."
Bueno, no será una de mis canciones preferidas y el video tampoco representa mucho aquello que me viene a la mente cuando escucho esta canción, pero ultimamente me recuerda a muchas cosas que me tocaron en esta vida. Personas que quise en algún momento, o que sigo queriendo, y que se hacen presentes en mi mente con esta canción.
"Cuando se pierde la confianza de quien amas ya no hay nada no hay razón". Cuanta razón tiene esta frase. Personalmente, creo que mi confianza se puede ganar de mil modos, con pequeños gestos, pero el hecho de perder esa confianza, puede ser automático.
Esta entrada esta dedicada, más bien a aquellas personas que no aprovecharon las oportunidades que bien supe dar, y que me lastimaron como quisieron.
Va dedicada a aquellas personas que están diariamente conmigo, siempre presentes. Les agradrezco todo.
Y de alguna manera, a aquellas que entrarán en mi vida.
¡Buenas noches a todos!